Aunque ya he hablado de mi aprecio hacia las plumillas de acero, instrumento que considero superior a cualquier otra herramienta para escribir o dibujar con tinta, está claro que tienen sus desventajas, sobre todo si queremos utilizarlas en determinados momentos y situaciones.
Los rotuladores calibrados, de pincel, caligráficos biselados y otros instrumentos parecidos pueden resultar muy útiles. Son limpios, fiables y podemos disponer de ellos en cualquier ocasión.
Pero hoy vamos a examinar algunas otras posibilidades, empezando por distintos tipos de plumas estilográficas útiles para dibujar o hacer caligrafía. Si bien, en principio, cualquier buena pluma sería utilizable, hay algunas que lo son especialmente.
La primera pluma es un modelo de Montblanc con una punta bastante fina, que es uno de las cualidades que, normalmente, buscamos para dibujar.
Ésta otra es un modelo ya descatalogado de Parker, Flight 180. Tiene la particularidad de que su tajo permite escribir o dibujar por ambas caras, con lo que una misma pluma nos ofrece dos grosores de trazo. En ebay pude encontrar una nueva para reponer otra que tenía desde hace bastantes años y se rompió.
La pluma anterior, es una Pelikán bastante normal, aunque este modelo permite intercambiar el tajo, que viene montado a rosca, con la unidad de alimentación de tinta. Esta pluma tiene un tajo de letra itálica, que luego se ha retocado para afilarlo con una piedra de Arkansas. Hace líneas gruesas o finas según la dirección de trazo. Suelo cargarla con tinta Oyster Grey de Montblanc. Con ella se ha hecho este dibujo, retocado con pincel de agua:
E.S. Perry, fabricante inglés de plumillas metálicas, creó unas con reservorio que permitían almacenar bastante tinta. Manteniendo la forma de esas plumas y la calidad y dulzura que las caracterizaba, le añadió un depósito para la tinta, fabricando con ellas novedosas plumas estilográficas, pero manteniendo la posibilidad de cambiar de plumilla. Aqui vemos dos de las opciones: Copperplate y Sketch.
La Copperplate es muy fina y flexible, creada para ese tipo de letra (inglesa). Tiene docenas de formas y tamaños distintos, aunque hay que buscarlas en internet pues hace más de veinte años que no se fabrican. Según el fabricante, la plumilla Sketch permite cargar la pluma con tinta china. Por si acaso no lo he probado.
Esta pluma estilográfica, Parker Vector, que se solía vender en juegos para caligrafía con tres plumillas de grosores diferentes, tiene la suavidad y fluidez propia de Parker, a pesar de costar un precio muy razonable. La que muestro, le he dado un repaso con la piedra de Arkansas para que no rasque nada en ninguna dirección.
Entre el inmenso catálogo de Rotring, encontramos estas plumas en diferentes formas y grosores. Aquí vemos una itálica, de 1,1 mm. y otra EF. Las dos son muy suaves y fluye en ellas la tinta de una forma increíble, a pesar de que pueden utilizar una tinta (la que Rotring vende para ellas) que es la más negra y espesa que conozco, aparte de la tinta china. También tienen cargador de émbolo para quien los prefiera a los cartuchos.
La escritura anterior se ha hecho con tres plumas Parallel Pen de Pilot, en 6, 3,8 y 2,4 mm. (Existe otro grosor, 1,2). El dibujo con la 6.0. Este invento de Pilot, una maravilla, es tan sencillo como dos láminas paralelas de metal a través de las cuales fluye la tinta por capilaridad. Viene a sustituir a los cálamos y a los llamados "Witch pen" que existían para hacer líneas anchas:
De todas formas, renocociendo su utilidad y no renunciando a utilizarlos cuando sea menester, no puedo terminar ésto sin volver a reafirmar mi amor por las verdaderas plumillas. Nada como ellas: